Cuando hablamos de Betaespera, nos referimos al tiempo que hay que esperar después de una transferencia embrionaria hasta conocer los resultados de la prueba de embarazo, que suele ser aproximadamente de unos 15 días.
Durante este tiempo la mujer o la pareja suele experimentar diferentes sensaciones, desde altas expectativas, euforia, ilusión, hasta incertidumbre, ansiedad, irritación, falta de control, emociones tan dispares que pueden generar una espera complicada y estresante. Por este motivo, os dejos algunos consejos que pueden ayudaros a sobrellevar mejor, aunque sea un poco, esta espera.
Realiza actividades placenteras que te distraigan un poco del ansiado embarazo. Estaría bien hacer algo conjunto con la pareja que os distraiga un poco. También es un buen momento para mimaros y daros un pequeño capricho.
Intenta hacer vida normal. Sé que es difícil, sobre todo en un momento tan importante como el que estáis viviendo pero permitiros un respiro, es saludable para uno mismo y para la pareja retomar un poco de vida normal.
Evita pensamientos negativos e intenta cambiarlos por pensamientos positivos y una actitud más abierta. La ansiedad anticipatoria que generan estos pensamientos te hacen estar mal. Te propongo un par de ejercicios para sobrellevar estos pensamientos y emociones: 1. Realiza ejercicios de relajación y meditación una vez al día, al levantarte o antes de irte a dormir puede ser un buen momento. 2. Escribe en un diario lo que sientes y lo que piensas. 3. Repítete a tí misma mensajes positivos cada día, como por ejemplo: “Hoy voy a disfrutar y no me dejaré llevar por la angustia”.
Evita las generalizaciones. Muchas veces los resultados no son positivos en el primer ciclo, ni en el segundo, por lo que es importante que tengas en cuenta que quizás no lo consigas en este ciclo, pero sí en el siguiente.
Intenta evitar la hipervigilancia, ya que muchos síntomas pueden confundirse.
Favorece la comunicación con tu pareja, es importante que cada uno entienda cómo lo está viviendo el otro, pero intentad no centrar siempre el tema de conversación en los tratamientos y en el embarazo.
Cuenta con una fuente de apoyo social que te ayude a soportar la espera y te distraiga un poco. No te aísles, ni tú, ni tu pareja.
Pero si a pesar de todos los esfuerzos, sientes que la situación te desborda, no dudes en pedir ayuda psicológica para reducir el malestar y afrontar mejor el resultado.